Aproximadamente, 40 millones de niños y niñas sufren violencia en el mundo. Así lo estima la Organización Mundial de la Salud (OMS), que define el maltrato infantil como “toda forma de maltrato físico y/o emocional, abuso sexual, abandono o trato negligente, explotación comercial o de otro tipo, de la que resulte un daño real o potencial para la salud, la supervivencia, el desarrollo o la dignidad del niño en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder”.
Con la ratificación de la CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO, los Estados tienen la responsabilidad de adoptar medidas apropiadas y eficaces, legislativas y políticas, para prohibir y erradicar la violencia contra la infancia, incluyendo el abuso y la explotación sexual infantil.
Las normas internacionales destinadas a la lucha por la erradicación del abuso y la explotación sexual infantil en sus diferentes manifestaciones prescriben una intervención de los poderes y administraciones públicas basada en la prevención, persecución de los delitos y protección de las víctimas.
El primer y fundamental paso para su efectividad es reconocer su existencia y romper el silencio en torno a él.
En este sentido la ONG Save The Children ha publicado recientemente un nuevo informe titulado “Violencia sexual contra los niños y las niñas. Abuso y explotación sexual infantil”, cuyo objetivo es orientar la actuación de los profesionales implicados en la protección, atención y cuidado de menores, que puedan sufrir estas formas de violencia.
Este material ofrece pautas de intervención ante la sospecha de este tipo de maltrato, y adjunta una serie de propuestas para luchar contra el abuso y la explotación sexual infantil, tales como campañas, vídeos de sensibilización o guías de formación para profesionales.
Os dejo enlace para poder descargar la guía:
http://www.savethechildren.es/ver_doc.php?id=155